CATCOM Racing

06/08/2024 | 12:00h. | REPORTAJES

Navarro y Flores, los coleccionistas de sueños

CATCOM Racing el reducto del motor

Iván Hernández

En una pedanía a unos 32 kilómetros de Barcelona y de unos quince mil habitantes en la comarca del Vallés Occidental, en Palau Solitá y Plegamans se encuentran dos entusiastas acérrimos del motor. Por un lado Juan Navarro que ya nació con eso en las arterias y por el otro esta Montserrat Flores, que por esas cuestiones del destino le fue calando con el tiempo y no por ello menos intenso.

Después de estar varios años poniendo en diferentes localizaciones de Barcelona su base de operaciones, finalmente en el año 2009 "Cataluña Competición Racing" definición de CATCOM Racing, encuentra su ubicación definitiva, y en la mente de Juan está no emplazarse más y comenzar a darle forma a su particular pinacoteca del motor.

La cuestión a partir de aquel año era la de darle transformación, uso y colorido en forma de piezas aquel lugar, donde las horas se hacen segundos y los días minutos. El sitio perfecto para que el duo Navarro - Flores pudieran y puedan desarrollarse en los proyectos en los que estaban involucrados, siendo también así en la actualidad.

En CATCOM Racing a medida que pasaba el tiempo el museo había que aumentarlo, y para tal cometido Navarro haría de "curador de arte", lupa en mano, audazmente y también tirando de contactos se iría haciendo con piezas curiosas, conocidas y míticas para su taller, o bien llegaban enteras o despiezadas que con tiempo se convertiría en unidades totalmente rehabilitadas.

En el momento de visitar el taller, varios modelos ilustres como Renault 5 Turbo 1, BMW M3 E30, Ford MK1, Renault Clio V6, etc, eran los que nos daban la bienllegada, vehículos que muchos eran de su propiedad y algún que otro era de clientes que estaban depositados allí para darle el mantenimiento necesario.

Al entrar a la nave levantabas la vista y todas sus parades estaban recubiertas con estanterías llenas de un multitudinario despiece de lo más variopinto. Preguntabas por algo, Juan se acerba y su cabeza parecía una base de datos de cualquier empresa de logística, te citaba la historia, procedencia y la utilidad para la que estaba destinada la citada pieza. El lugar era una especia de cofre gigante donde te podías encontrar cualquier metafórico tesoro y con fragmentos de historias en algunos casos.

Las instalaciones estaban divididas en dos partes, la más grande era el almacén destinado a los vehículos y a toda la marabunta de repuestos, y por otro lado el lugar de operaciones, un garaje independente con elevador y todo lo necesario para destripar y montar cualquier cosa que se lo ponga a mano a Juan Navarro.

El vehículo destacado

Mitsubishi Galant VR4 ex RALLIART Islas Canarias

De este coche ya se ha escrito, leído y visto muchísimo en España. Como muchos conocerán fue una de las dos unidades que vinieron al archipiélago para RALLIART Islas canarias. En el año 90 la primera y dos años más tarde llegaría la segunda. Coches pilotados por los integrantes del equipo, primero José Luis Rivero que venía de ganar la Copa de España de Rallyes en al año 88 con un Mitsubishi Starion y luego pasaría a manos del piloto lagunero Ricardo Avero, que tenía un programa doble con los Galant. El Campeonato de Canarias de Rallyes de asfalto y casi al tiempo por otro lado el Campeonato de España también de asfalto.

En el año 1994, acaba ese bonito recuerdo. O por lo menos lo que era RALLIART Islas Canarias. Todo el material es vendido a la multinacional R.J Reynolds y decorada con una de su mítica marca, "Camel", y esta a su vez lo cede al piloto grancanario Antonio Ponce, que los hace correr en rallyes y montaña en Canarias. Los dos VR4 son matriculados debido que hasta ese entonces disponían de las míticas placas rojas de la época, siendo sus matrículas las siguientes: (GC -0391 -BD) y (GC - 0392 - BD)

Después de mucho tiempo pasaba por diferentes pilotos; Ricardo Avero, Toñi Ponce, Juan Luis Cruz, Juan Cartaya, Oscar Martínez (Bilbao), y el riojano Roberto Iglesias. En el año 2004, Roberto desplaza la unidad hasta Gätmo para restaurarlo, invirtiendo una cantidad económica importante para tal cometido y el vehículo a final del año 2015 recala en CATCOM.

Junto con el coche también había un lote importante de repuestos y dos carrocerías que fue desplazando desde la Rioja hasta Barcelona poco a poco. A partir de ahí comienza el arduo trabajo de Juan con el Mitsibishi, lo desmonta por completo, al taller le llega de color rojo que era la decoración que tenía su anterior propietario, Roberto Iglesias. Repara una serie de desperfectos que tenía, elimina la entrada de aire del techo que provenía de un Mitsubishi EV VI y le instala las originales de la época. Entre el gran lote de repuestos del que cuenta, hay una circunstancia curiosa, y es que uno de sus propietarios anteriores, Oscar Martínez se había desplazado a Inglaterra y había adquirido un lote de piezas de un Mitsubishi Galant VR4 siniestro que había pertenecido al fallecido piloto finlandés Pentti Airikala. Y aunque se habían desecho de la carrocería, parte del despiece estaba en poder de Juan Navarro. Esto ayudó a modificar la carrocería, sustituyendo elementos como fueron las puertas y el portón trasero que traía el coche por los de fibra que montaba el del piloto finés.

La instalación eléctrica la reconstruye por completo. Los relojes e indicadores del salpicadero los reorganiza e instala nuevos ya que como él nos comentó "venía uno de cada madre y muchos fueron saqueados". Algunas bombas de freno fueron restauradas, la mecánica ni se tocó debido a que años atrás el motor se llevó a Gätmo que era el motorista de estos vehículos y se invirtió una cantidad importante de dinero en la unidad de potencia, solo cambio de aceite y correa de la distribución. Culminado todos los entresijos ya solo tocaba la decoración, decide que sea la oficial de RALLIART Islas Canarias que llevó el coche cuando estaba disputando las pruebas del Campeonato Canario.

Dos meses y medio de sacrificio e inversión multitudinaria de horas de trabajo que, incluso en su primera participación en la prueba en la que fue el debut de Juan y Montse, el Rallye Festival Trasmiera quedaban aun algunos detalles que montar. En carrera a pesar de la rotura de un palier, cosa que solventaron bien, la experiencia enriquecedora, positiva y a partir de ahí comenzaría un bonito idilio de pruebas y pruebas en territorio nacional y extranjero.

Momento donde se desmontó la carrocería para restaurar y se eliminaba el color rojo con el que llego de su anterior propietario

Mas actividad y el futuro

Son varios más los modelo que se encuentran en el emplazamiento de CATMON Racing bajo la tutela de Juan. Un bonito Ford MKI verde con franjas amarillas donde ruedan en circuitos. Un Renault Turbo 1de serie que ya lleva casi 20 años en su poder y que no duda en ponerlo a la venta. Un Renault Clio V6 de circuito que fue Campeón de Europa en el 2001 de la categoría y que también está en venta. Y un modelo de leyenda, el Talbot Sunbeam Lotus con una historia muy peculiar que merece un reportaje para él solo, y en breves fechas se unirá a la familia un coche que también llega desde Canarias y que estuvo disputando pruebas de tierra. Un pequeño Grupo B del piloto gran canario Nicasio Montesdeoca, el Citroën Visa 1000 Pista. Donde será otro proyecto más de reconstrucción. Su idea es volver a darle la imagen que tuvo en aquellos años de esplendor.

Llegados hasta aquí, quiero agradecer la máxima hospitalidad y predisposición ofrecida por Montse Flores y Juan Navarro a mi fusilamiento de preguntas, y quizás esto tenga, una segunda parte.

DETALLES FOTOGRÁFICOS